El capital humano se ha convertido hoy en un activo más de las empresas, influyendo directamente en sus posibilidades de éxito. Lejos de ser un simple costo, representa una inversión estratégica que puede generar retornos importantes a largo plazo.

Pero, ¿qué es exactamente el capital humano y por qué es vital que las empresas inviertan en él? ¡Vamos a explorarlo en este artículo!

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¿Qué es el capital humano?

En teoría económica, se usa el concepto de capital humano para estimar el valor productivo y económico de las habilidades profesionales de las personas que integran una organización. O, dicho a la inversa, es la capacidad intelectual, creativa y productiva de los trabajadores, traducida a un valor económico.

En otras palabras, el capital humano mide cuánto vale económicamente lo que los empleados saben hacer. 

Podemos imaginar el capital humano como una valija que tiene cada trabajador, que se va llenado de conocimientos, experiencias y habilidades útiles para trabajar y producir bienes o servicios. Como toda maleta, el trabajador puede llevarla consigo a donde sea que vaya, aportando valor a la organización.

Origen del concepto de capital humano

El concepto de capital humano proviene de la teoría económica del crecimiento, desarrollada por los economistas Theodore Schultz y Gary Becker.

Según este enfoque original, el capital humano es un factor más de la producción junto con la tierra, el trabajo y el capital. Siguiendo a los autores, el concepto se basa en el grado de formación y productividad de las personas, y es tan importante para el éxito de una empresa o economía como los otros factores.

En su estudio, estos economistas argumentaban que el crecimiento económico de las sociedades se podía explicar introduciendo la variable del capital humano que, hasta entonces, no había sido tenida en cuenta.

Evolución del concepto de capital humano

Sin embargo, hoy el concepto de capital humano es mucho más integral que aquella visión economicista que lo entendía como un factor de producción similar a la maquinaria o las instalaciones de una empresa.

La visión sobre el capital humano ha evolucionado para incluir aspectos como la salud, el bienestar, la formación y el desarrollo personal de los empleados. Este enfoque integral considera a los empleados como personas con necesidades, aspiraciones y valores y es por eso que muchos usan este término como sinónimo de desarrollo humano o de desarrollo de talento.

Además, hoy se entiende al capital humano como un activo complejo y dinámico. Invertir en  él no solo genera beneficios económicos, sino que también crea un ambiente de trabajo positivo, seguro y productivo.

¿Por qué es importante el capital humano para las empresas?

El activo más importante que tiene una empresa son las personas que la integran. Sin ellas, las empresas no podrían funcionar. Aunque se pueden automatizar procesos y robotizar la producción, los recursos humanos capacitados siguen siendo claves. 

Un equipo bien formado, motivado y comprometido genera mejores resultados, se adapta a los cambios y enfrenta los desafíos del mercado de manera más efectiva. 

Para hacer un ejercicio rápido, piensa ahora en las empresas líderes del mercado en el que trabajas. ¿Cuál es su capital humano? ¿Es igual que el de las empresas que recién comienzan?

Las empresas que son vanguardia destacan porque su capital humano es más valioso. Imagina a Google, Microsoft, IBM, Salesforce. Esto se traduce en mayor productividad y en imagen positiva de la compañía. La inversión en el desarrollo del capital humano tiene un impacto directo en el éxito y la competitividad de la organización.

¿Por qué invertir en capital humano?

Sabemos que las inversiones representan un sacrificio de recursos en el presente para mejorar la productividad laboral en el futuro. 

Este sacrificio puede implicar destinar tiempo de trabajo de algunos empleados a actividades de capacitación, proporcionar los medios materiales necesarios o financiar programas de desarrollo, entre otros. Aunque este consumo de recursos puede ser significativo, los beneficios a largo plazo justifican la inversión.

Ahora bien, un empleado puede mejorar su capital humano mediante programas subvencionados por el Estado, financiados por instituciones sin ánimo de lucro o por la misma empresa. 

Incluso, hay otros componentes del capital humano además de la formación en los cuales se puede invertir. Por ejemplo, promover hábitos de vida saludables pueden mejorar el bienestar de las personas sin tener que realizar un desembolso significativo de dinero.

Las inversiones en capital humano, como cualquier otra inversión, conllevan riesgos. Aunque generalmente estas inversiones optimizan las expectativas salariales y la empleabilidad, los resultados pueden variar entre las personas. 

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5 beneficios de invertir en capital humano

  1. Mayor productividad y eficiencia: Un equipo capacitado y motivado genera mejores resultados y optimiza los recursos disponibles.
  2. Mejora el clima laboral: Un ambiente de trabajo positivo y colaborativo fomenta la satisfacción y el compromiso de los empleados.
  3. Reducción de la rotación de personal: Retener el talento humano evita los costos asociados a la contratación y capacitación de nuevos empleados, lo que resulta en una mayor estabilidad organizacional.
  4. Mejora la adaptación al cambio: Un equipo con habilidades y conocimientos actualizados puede afrontar los desafíos del mercado de manera más efectiva.
  5. Mejora de la imagen de la empresa: Una empresa que invierte en su capital humano proyecta una imagen positiva y atractiva para los mejores talentos, fortaleciendo su marca empleadora y su reputación en el mercado.

¿Cómo potenciar el capital humano en una empresa?

Potenciar el capital humano de una empresa implica invertir en actividades vinculadas a la formación, la motivación, la innovación y el cuidado de la salud. Vamos qué elementos integran el capital humano y cómo se relacionan y potencian entre sí:

Formación y capacitación

Las actividades formativas, tanto estudios oficiales como cursos y talleres no formales, son la base para el aprendizaje de nuevos conocimientos y habilidades. Estas formaciones no solo permiten a los empleados realizar mejor su trabajo, sino que también refuerzan hábitos importantes como el esfuerzo y la motivación.

La formación de los empleados beneficia a la empresa al mejorar la productividad y al potenciar su capacidad competitiva.

Para los empleados, la obtención de títulos y certificaciones mejora su empleabilidad y facilita el avance en sus carreras. Además, interactuar con otros profesionales durante la formación le abre al trabajador oportunidades para colaboraciones futuras y relaciones beneficiosas.

Salud y bienestar

La salud física y mental de los empleados es fundamental para garantizar su desempeño óptimo y prevenir el ausentismo. Invertir en programas de salud y bienestar no solo mejora la calidad de vida de los trabajadores, sino que también mejora el compromiso con la empresa. 

Un entorno laboral que promueve el bienestar contribuye a reducir el estrés y el agotamiento, asegurando que los empleados puedan trabajar más satisfechos y a gusto con su lugar.

Ejemplos de inversión en salud y bienestar 

En este punto se pueden incluir las inversiones en programas de salud y bienestar como programas de nutrición y alimentación saludable, seguros de salud, planes de vacunación, fomento del ejercicio regular, voucher para gimnasios o asesoramiento y apoyo psicológico, entre otros. Además, el horario flexible o la posibilidad de trabajar homeoffice son puntos que también pueden ser considerados como acciones de promoción del bienestar y la salud.

Habilidades blandas

Las habilidades blandas, o soft skills, ayudan al crecimiento profesional de los empleados y contribuyen a una mejor relación laboral. Estas habilidades incluyen la comunicación efectiva, la resolución de problemas, el trabajo en equipo, la empatía y la capacidad de adaptación, entre otras. 

Al promover el desarrollo de habilidades blandas, las organizaciones pueden mejorar la colaboración entre los empleados, aumentar la satisfacción laboral y fortalecer las relaciones con los clientes y socios comerciales.

Ejemplos de inversión en soft skills

Para mejorar las habilidades blandas, se puede invertir en programas de entrenamiento en comunicación y resolución de conflictos, actividades de trabajo en equipo y proyectos colaborativos o sesiones de retroalimentación y desarrollo personal. 

Además, el establecimiento de un entorno laboral inclusivo y de apoyo, donde se valoren y se reconozcan las habilidades blandas, puede motivar a los empleados a mejorar continuamente sus habilidades y contribuir de manera positiva al éxito de la empresa.

Experiencias y relaciones interpersonales

Las experiencias y relaciones externas pueden aportar al desarrollo del capital humano de una empresa, enriqueciendo las perspectivas individuales y fomentando conexiones valiosas para el crecimiento profesional. 

Viajar y socializar con personas de diferentes entornos culturales y profesionales amplía el conocimiento del mundo de los empleados, inspirando nuevas ideas y enfoques en su trabajo diario. Además, estas experiencias ayudan a construir redes de contactos sólidas, facilitando colaboraciones en el ámbito profesional. 

Ejemplos de inversión en experiencias y relaciones interpersonales

Se puede promover este punto con programas de intercambio, eventos de networking y socialización, programas de mentoría y coaching, incentivos para la participación en actividades sociales o voluntarias, entre otras.

¿Qué es la gestión del capital humano?

La gestión del capital humano no debe confundirse con el reclutamiento: es mucho más que contratar y capacitar empleados. Es un proceso estratégico que busca optimizar el desarrollo, la retención y el aprovechamiento del talento humano dentro de una organización. 

Como todo proceso estratégico implica planificación, reconocimiento de metas y objetivos y trazado de acciones concretas para alcanzarlos.

Por ejemplo, ¿implentas programas que identifiquen las habilidades clave de los empleados y ofrezcan oportunidades de crecimiento personalizadas? Esta es exactamente una acción de gestión del capital humano.

Plataformas digitales: como gestionar el capital humano con IA

La tecnología transformó la forma en que las empresas gestionan su capital humano. Las herramientas como el software de gestión del capital humano y las plataformas digitales ofrecen una amplia gama de beneficios, desde la automatización de tareas administrativas hasta el análisis avanzado de datos. 

Por ejemplo, la inteligencia artificial (IA) puede utilizarse para identificar patrones en el desempeño de los empleados y ofrecer recomendaciones personalizadas para su desarrollo profesional. Al integrar tecnología avanzada en la gestión del capital humano, las empresas pueden mejorar la eficiencia operativa y ofrecer una experiencia superior a sus empleados.

Algunos ejemplos de plataformas digitales son:

  1. SAP SuccessFactors
  2. Workday Human Capital Management
  3. Oracle HCM Cloud
  4. BambooHR
  5. ADP Workforce Now
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